Generalidades

Sabía Usted que 60 al 70% de la población adulta en México padece de Várices de las extremidades inferiores y  2 a 3%  desarrollan  Ulceras Varicosas?

Las VARICES son las venas dilatadas, hinchadas, retorcidas que se presentan generalmente, en el trayecto del pie y la pierna hacia el muslo,  pero pueden presentarse en otras partes del cuerpo, como en el esófago, alrededor del ombligo o genitales, por ejemplo, lo cual ocasiona que los vasos sanguíneos (venas) adopten trayectos tortuosos, en forma de sacos cilíndricos, irregulares que generalmente pueden verse bajo la piel, con frecuencia son de color rojo o azul y  la   mayor parte de las veces son dolorosas.

Se presentan con mayor frecuencia en  las Mujeres que en  los Hombres.

Causas

Normalmente, las válvulas que se encuentran en el interior de las venas de las  extremidades inferiores son  unidireccionales favoreciendo su drenaje y desembocadura  de la sangre desde las piernas hacia arriba hasta llegar al  corazón.  Cuando las válvulas no funcionan correctamente, la sangre se regresa  hacia abajo y se mantiene en la vena, acumulándose ahí y produciendo hinchazón y dilatación venosa, lo cual  produce la deformidad denominada  varices.

Los principales factores que influyen en la formación de varices son:

La Herencia, con mayor promedio de rama materna, y la edad avanzada, oficios que requieren permanecer mucho tiempo de pie o con los pies hacia abajo (empleos de oficina, vendedores, maestras, enfermeras, policías, carteros, etc.), y también la falta de ejercicio adecuado, así como según la etapa biológica en que se encuentre  la mujer  (los cambios hormonales por la pubertad,  durante el embarazo y la menopausia pueden conducir a las venas varicosas), tomar píldoras anticonceptivas u hormonoterapia también puede aumentar el riesgo. Nacer con válvulas defectuosas, Obesidad y sobrepeso,  así como es importante mencionar que  los trastornos de la coagulación la acentúan,  antecedentes de coágulos sanguíneos en las piernas previamente,  y los Antecedentes familiares de varices deben tomarse en cuenta de igual manera.

El Cuadro Clínico

Los síntomas que habitualmente se presentan  en los pacientes que tienen várices son los siguientes:  Hinchazón en ambas piernas de predominio vespertino, sensación de pesadez en las extremidades,  fatiga, calambres ocasionales que se hacen cada vez más constantes y duraderos, hormigueos,  dolor, piquetes, sensación de adormecimiento, piel seca, escamosa e irritada,  comezón, ardor, cambios de color en la piel de las piernas o los tobillos y la aparición de moretones, hasta llegar al café oscuro y el negro. En un principio con engrosamiento y endurecimiento de la piel en las piernas y los tobillos hasta llegar a la  ruptura y desencadenar en  la formación de Llagas (úlceras cutáneas) que no sanan fácilmente con los tratamientos convencionales.

La forma de estudio y abordaje médico inicial es mediante la elaboración  minuciosa de la Historia Clínica del paciente, para determinar cuáles son las causas predominantes y trabajar en corregirlas en forma preventiva y darles mantenimiento. Retirar o disminuir la mayor cantidad posible de medicamentos, y dejar los mínimos indispensables en un principio, para después de mejorar los hábitos alimenticios y mejorar la actividad física en forma personalizada, suspender los que ya sean innecesarios.

 El médico lo examinará para determinar el grado de calidad de su circulación venosa y arterial, así como la función sensitiva superficial y profunda, que también llega a afectarse en etapas tardías, y  buscará  datos de  inflamación,  aguda y/o crónica, descartar otros trastornos de las piernas (como un coágulo de sangre en las venas de las piernas), así como cambios en la coloración de la piel , documentar la extensión del daño cutáneo ya que el  obscurecimiento como aclaramiento de la piel (atrofia blanca), son datos sugestivos de la pronta formación de úlceras o llagas en las piernas.

Pruebas y exámenes

El Médico le solicitará realizarse estudios de laboratorio para ver el estado general de la sangre, la coagulación, la función del riñón y corazón habitualmente, y en base a estos resultados, diseñar un plan terapéutico para mejorar la calidad de su circulación sanguínea.

En muchas ocasiones se solicita un estudio denominado  Ultrasonido Doppler para ver el funcionamiento y grado de calidad de la circulación sanguínea en sus venas de las extremidades inferiores, así como otros similares dependiendo de la gravedad de las mismas.

Tratamiento

Hay diversas opciones de tratamiento según sea el caso y la etapa de avance que tenga la enfermedad, la mejor forma de atenderse es previniendo la aparición de   varices y sus complicaciones, algunas delicadas como la trombosis local y otras graves como  la Tromboembolia pulmonar (que es causa de muerte repentina) se trataran con más calma en otro artículo dedicado a las complicaciones. También y menos grave aún pero más frecuente, es la presencia de  úlceras por varices  mejor conocidas como Ulceras Varicosas,  como hemos mencionado,  son las lesiones cutáneas por daño en la piel ocasionada por mala circulación sanguínea local, que se puede extender en forma considerable hasta rodear toda la circunferencia de la pierna como si fuera una polaina o sonaja de un danzante, y ser de difícil curación  inclusive por muchos años si no se recibe el tratamiento apropiado.

Para esto, hay diversas opciones de manejo según sea el caso y la etapa de avance que tenga la enfermedad, la mejor forma de atenderse es previniendo, empezando por una dieta individualizada, con el mantenimiento del peso en un rango adecuado,  como hemos insistido deberán modificarse los hábitos y costumbres incluyendo la alimentación  que sea lo más natural posible, reduciendo la ingesta de alimentos procesados, enlatados y con conservantes, así como  se recomienda caminar de 45 a 60 minutos al día en forma continua independientemente de las actividades del trabajo o del hogar, así como  con intervalos de descanso  de 10 a 15 minutos para reducir lo hinchado de las extremidades,  utilizar calcetas  de compresión leve y preferentemente de compresión moderada para mantener  la circulación de las piernas bien comprimida y las piernas sin hinchazón, o con vendajes en  forma continua,  además de realizar diversos tipos de  ejercicios como subir y bajar escaleras, habrá que tener  cuidados de las piernas, principalmente manteniendo bien hidratada la piel.

Tratamientos locales hay muchos y deberán personalizarse para erradicar esas  desagradables venitas de las piernas, mediante medicamentos tomados o aplicados tópicamente e incluso inyectados localmente con Escleroterapia, en las venas o en la periferia, Mesoterapia u otras opciones, la resección de las mismas con cirugía y/o LASER o Radiofrecuencia, según  sean las necesidades personales para resolver éstas de la mejor manera y devolverle la belleza a las piernas, una vez evaluada clínicamente definimos la mejor opción terapéutica.

Finalmente, para resolver el problema específico de las ulceras de la piel, hay diversas alternativas, desde la curación progresiva de las lesiones con múltiples productos hasta el cierre de los tejidos, recordando evitar el uso de sustancias y/o productos que los dañen y que no utilizaríamos bajo ninguna circunstancia  en nuestros ojos por ejemplo, como el Yodo, Alcohol, jabón, vinagre, Tepezcohuite y sustancias agresivas como el agua oxigenada. Ahora están  con mayor disponibilidad los apósitos o parches para la atención de las heridas, con lo que se mantienen más limpias e hidratadas las lesiones mientras van cicatrizando, o como preparación para la cobertura cutánea. Si es esta la elección, deberá supervisarse el cierre progresivo realizando los cambios de éstos apósitos según la mejoría de la úlcera. (en promedio cada 3 a 7 dias)

Otras opciones más complejas implican la aplicación de Piel del mismo paciente (injerto cutáneo) o  piel sintética para el cierre  de las lesiones en una o en varias sesiones, según sea lo considerado por el médico en conjunto con el paciente, debido a que  cada caso en particular  debe valorarse en forma individual y  en base a las condiciones específicas de cada área en particular.

La cirugía tradicional de extraer las venas safenas (Safenectomía) y sus  venas colaterales, cada vez se realiza con menor frecuencia, debido a que hay hoy en día vez más opciones menos agresivas y  conservadoras, así como también porque no decirlo, también más económicas, sin la necesidad de incapacitarse, como la Escleroterapia, en la  que se inyecta una solución médica  en las venitas afectadas y que al irritar la vena y taparla en forma parcial y después de varias sesiones, se obstruye en forma definitiva, nos permite que la circulación sanguínea se distribuya por otras venas de mejor calidad, y se realiza de forma ambulatoria, dejando la cirugía a un lado en muchos de los casos.

El recibir tratamiento médico o con cirugía (según sea el caso) para la reparación del daño en la circulación, nos favorece a la disminución de la presión sanguínea venosa y al cierre de la piel de la úlcera varicosa.

Con una adecuada valoración médica, con entusiasmo, y dedicación tanto del paciente, los familiares y del médico, se  encontrará  la mejor opción para la resolución de cada problema,  lo que sucede generalmente en unas pocas semanas para lograr  la curación.

Gracias por considerarnos para su atención.

Atentamente

  1. LUIS FERNANDO LIRA

CIRUJANO GENERAL

CIRUJANO PLASTICO

MEDICO ACUPUNTURISTA

MEDICO ESPECIALISTA EN HERIDAS COMPLICADAS

DIRECTOR GENERAL

0181-8347-7381   8348.8413

 www.medicolira.com            medicolira8@gmail.com

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